tu tipo

El niño se lo dio al capataz de la casa que estaba en renovación. Cada vez que regresaba del trabajo por la noche, pasaba por una casa en renovación y saludaba al peatón. Era su tipo favorito: grosero, serio pero que se folla a los hombres. Sin modificaciones, depilación con cera ni gimnasio. Un hombre normal y corriente, por eso estaba tan cachondo. Fui cogiendo confianza para abrir el partido. Estaba esperando una oportunidad para ir al grano y abrir el juego. Quería ese hombre dentro de ella. Y fue él mismo quien abrió el camino. Mientras hablaban, pasó una chica con calzas, bien ajustada y provocativa. A la cabra solo le faltó romperle el pescuezo y dijo: mira, ¿te gusta? Peor que no, respondió. Soy más idiota. El tipo se hizo el sorprendido y nos dijo que entráramos al edificio. Obtendrás lo que quieres entonces.